Skip to content

CEO 3.0: la generación de líderes que sabe cómo motivar y conectar con sus equipos

¿Sabéis cuál es el mejor método para atrapar a un pokemon? Hablo de una técnica casi perfecta, ancestral. Muy similar a la que ya empleaban los hombres de las cavernas para cazar mamuts o a la que utilizan los escaladores experimentados para llegar a los picos más altos. Se llama colaboración y es el método de trabajo que mejores resultados ha dado en la historia de la humanidad a la hora de trabajar en equipo. La actuación coordinada de un grupo con talento y motivado en pos de un objetivo común es seguro de éxito en cualquier carrera. ¿Y no debería ser la empresa ese tipo de organización?

Todos sabemos que, para sacar adelante cualquier tipo de proyecto, desde atrapar pokemons hasta cazar animales prehistóricos o conseguir los objetivos económicos de una compañía, es necesario contar con una estructura que garantice la estabilidad, la previsión y la resolución eficaz de desafíos conocidos. En este ámbito, todavía tiene sentido conservar la estructura jerárquica tradicional para adaptarla a los requerimientos de los nuevos tiempos: desechar lo que no sirve -el ordeno y mando sin opción a réplica- y conservar lo eficaz: los reflejos y la capacidad de motivar al grupo.

Sin embargo, fruto de las nuevas tecnologías y de su dimensión social, están surgiendo dentro de las organizaciones nuevas necesidades y nuevas estructuras que les dan respuesta. Se trata de estructuras redárquicas o de colaboración horizontal a través de las que el grupo conecta con su propia inteligencia colectiva. Son marcos de trabajo más flexibles y abiertos que los creados dentro de una estructura jerárquica tradicional y donde los trabajadores pueden dar rienda suelta a su creatividad, a su pasión, a su capacidad de compromiso y convertirse en líderes informales del proyecto. ¿Nunca habéis pensado: ‘Vaya, qué agilidad metal la de los tuiteros para reaccionar con reflexiones, dudas o bromas antes cualquier noticia de actualidad? Se trata de aprovechar esa sabiduría colectiva en la empresa, esa capacidad natural para innovar.

CONVIVENCIA Y LIDERAZGO 3.0

Estructuras jerárquicas y redárquicas tratan de convivir, en estos momentos, dentro de las empresas en plena transformación digital. Y según explica bien José Cabrera, experto en dirección de negocios de alta innovación, para garantizar una buena convivencia –o transición—entre ambas es crucial que el manager, CEO o gestor desarrolle las capacidades propias del liderazgo 3.0, que es sensato, conciliador, abierto y cuyo principal valor, en este cruce de caminos, es unir, asesorar y motivar a su equipo.

Hablamos de un gestor, manager o CEO 3.0 que lidera desde el corazón, como dice mi buen amigo Alfons Viñuela en su último libro, que yo mismo he tenido el placer de prologar y que representa un excelente complemento formativo a ‘El ABC del Autónomo’ si lo que se quiere es emprender y aprender a ser líderes de nuestro propio proyecto.

HOLOCRACIA:LA EMPRESA SIN JEFES

Por supuesto, en el marco de la organización 3.0 se barajan otras opciones en relación a las nuevas formas de gestión y liderazgo. Una de ellas es la holocracia u holacracia, un sistema de organización empresarial que propone eliminar la figura del jefe o gestor y distribuir la autoridad de forma horizontal. El mayor exponente de esta filosofía en la práctica es Zappos, una innovadora marca de zapatos adquirida por Amazon, y uno de sus más fervientes defensores el experto en transformación digital y emprendimiento Rafael Tamames. Tamames asegura que, con la holocracia, se fomenta en las empresas la transparencia y el espíritu intraemprendedor, lo que se traduce en eficacia, productividad y reducción de costes, si se sabe implementar. No parece mala opción.

Yo me quedo con el liderazgo 3.0. Hasta los famosos creadores de Pokemon Go han entendido que, tanto jugar como trabajar por un objetivo, es mejor si se hace en equipo y se cuenta, además, con un líder que dirija al grupo hacia sus objetivos. Puede tener sentido conservar esta figura en el ajedrez de la empresa del futuro.

LÍDERES MADUROS, EMPRESAS MADURAS

Merece la pena que todos, también los gestores o líderes, se beneficien y se adapte a las exigencias de la transformación digital para poder dar lo mejor de sí mismos en las nuevas organizaciones. Porque dentro de un organismo, tan importante es la función del hígado como la del riñón con los pulmones. Y si uno de estos órganos debe adaptarse a nuevas condiciones, tienen que hacerlo todos para que el sistema funcione.

Y es duro, admitámoslo. Cambiar no es fácil para nadie, la inercia es fuerza poderosa y el miedo al movimiento es humano, no cabe duda. No obstante, para sobrevivir hay que evolucionar. Madurar, aunque siempre vayan a parecer más cómodas las viejas estructuras del pasado, donde estábamos seguros. Un liderazgo maduro permite madurar a una organización.   Quién dice que el pasado siempre fue mejor. Veamos lo que nos depara el futuro de la transformación digital.

 

Share on linkedin
Share on twitter
Share on facebook
Share on whatsapp
Share on email

Comentarios

Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!


Añadir un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *